El verano puede ser una época divertida y emocionante para las familias. Hay tantas actividades que pueden hacer juntos que parece que las opciones son infinitas. Al mismo tiempo, las vacaciones de verano pueden resultar estresantes. El cambio de un horario escolar estructurado a tiempo libre extra puede resultar abrumador para los niños (y para los padres). Con un poco de planificación y algunos consejos, puede hacer que la transición al verano sea suave.
1. Mantener un horario
Mantener un horario durante el verano es una forma estupenda de ayudar a los niños a adaptarse sin perder la estructura. Una opción es mantener un horario similar al del colegio, es decir, las mismas horas de levantarse y acostarse. Esto ayuda a mantener la coherencia con su hijo, e incluso puede ayudarle con la transición de vuelta a la escuela cuando termina el verano. Otra opción es planificar un horario semanal o diario. Esto puede ser más útil si tu familia está planeando unas vacaciones o cualquier otra actividad. Para facilitarle las cosas a su hijo, hable de sus planes con antelación. Podrías repasar tus planes para el día siguiente a la hora de acostarte, recordarles cuándo van a despertarse y si hay alguna actividad que vayan a hacer.
2. Planificar las actividades con antelación
Hay tantas opciones de actividades para hacer durante el verano. Esto puede parecer abrumador o como si tuvieras que completarlos todos. En lugar de intentar incluir todas y cada una de las actividades, haz que tu hijo participe en la planificación. Juntos podéis planificar una lista de cosas que hacer en verano con las actividades que más os apetezcan. Aquí tienes algunos consejos para crear una lista de cosas que hacer en verano sin estrés. También es importante programar tiempo de descanso. No puedes hacer actividades todo el tiempo, tanto tú como tu hijo empezaréis a sentiros abrumados y agotados.
3. Utilizar los recursos comunitarios
Hay montones de recursos comunitarios disponibles para las actividades de verano. Jugar en el parque, refrescarse en un chapoteadero o ir de excursión son tres actividades gratuitas que puedes hacer con tu familia. Esta lista de actividades gratuitas para hacer en Utah, tiene toneladas de grandes ideas. Otra opción es acudir a la biblioteca local. Muchas bibliotecas tienen programas de verano en los que pueden participar las familias. Me encantó el programa de lectura de verano de mi biblioteca local, pero si la tuya no tiene uno, siempre puedes crear el tuyo propio.
4. No pasa nada por aburrirse
Durante el verano puede parecer que tienes que mantener a tus hijos entretenidos todo el tiempo. Aunque se trata de un esfuerzo admirable, no es sostenible. Está bien que tu hijo se aburra. Permitir que tu hijo se aburra puede ayudarle a aumentar su creatividad y a ganar independencia. Si tu hijo te dice que se aburre, aquí tienes algunos ejemplos de frases que puedes utilizar para reconducirlo:
- «Oh, me encanta aburrirme, no puedo esperar a ver lo que terminas haciendo».
- «Debe ser duro, pero confío en que puedas encontrar algo que hacer».
- «Parece un buen momento para dedicarte tiempo a ti mismo y probar algo nuevo».
Si a tu hijo le cuesta mucho aburrirse, puedes crear un tarro del aburrimiento lleno de actividades que pueda hacer solo. Aquí tienes una lista de 16 actividades para niños menores de 6 años que puedes incluir en tu tarro.
5. En
coraje aprendizaje en verano
Por último, el verano también es un buen momento para fomentar el aprendizaje de su hijo. Hay muchas actividades divertidas y educativas. Si quieres más información sobre cómo evitar que tu hijo se quede atrás durante las vacaciones de verano, consulta esta entrada del blog.
Espero que estos consejos y trucos te ayuden a disfrutar del verano en familia.
-Anne, becaria de apoyo a los padres