Recuerdo haber hecho de canguro de mi sobrina pequeña no hace mucho. Toda la tarde preguntó: «¿Coches?». Esto era código para: «¿Podríamos ver la película Cars?». Pronto encendí la televisión y me senté con mi sobrina mientras ella miraba atentamente. Me quedé intrigado cuando empecé a notar que no apartaba los ojos del televisor. Ella, como muchos de nosotros, tenía los ojos llorosos debido a la cantidad de concentración que ponía en la pantalla. Esta experiencia me hizo pensar en lo que podría estar haciendo en lugar de ver la tele y si cambiar su actividad podría mejorar su desarrollo general.
Los estudios demuestran que debe limitarse el tiempo de televisión de los niños. Los lactantes de 0 a 18 meses no deben estar expuestos a la televisión, los niños de 2 a 5 años deben poder verla una hora al día y los mayores de 6 años deben tener un tiempo limitado con los medios de comunicación. Sabemos que ver la tele no es necesariamente la mejor actividad para nuestros hijos, así que ¿qué podemos hacer para entretenerlos activamente?
Según el libro de Janet Lansbury, Elevating Child Care, el juego independiente autodirigido es lo mejor para el desarrollo del niño. Lo que a nosotros nos puede parecer una tarea aburrida, puede ser la experiencia estimulante adecuada para un bebé o un niño. Cuando los niños parecen aburridos, están a punto de tener una idea para una nueva actividad. A veces, prestarles más atención o ponerlos a dormir la siesta puede ayudar.
He aquí algunas actividades que los niños pueden hacer para sustituir el tiempo de televisión:
- Dibujar con lápices de colores
- Jugar con bloques o Lego
- Muñecas y casas de muñecas
- Vestirse
- Puzzles
- Bolas
- Clasificadores de formas
- Plastilina
- Juguetes con ruedas
- Tiza para aceras
- Explorar el aire libre
- Libros
- Libros en cinta/CD de su biblioteca local
Los objetos sencillos pueden estimular la imaginación y el juego. Ten siempre presente que queremos fomentar el aprendizaje activo, la resolución de problemas dirigida por los niños y la experimentación creativa, en lugar de «hacerlo bien». ¡Esto es lo que puede hacer el juego autodirigido!
Si podemos posponer el uso de la televisión (o romper el hábito en los primeros años), nuestros hijos tienen oportunidades de desarrollar las vías neuronales necesarias para ser buenos oyentes y aprendices, mejorar su motricidad gruesa y fina, aumentar su capacidad para resolver problemas y mostrar su creatividad. Todas estas actividades dan lugar a un fuerte sentido de uno mismo.
Dedicar tiempo al juego autodirigido requiere un esfuerzo consciente, sobre todo cuando sería más fácil encender la televisión para sentirnos productivos durante el día. Los beneficios merecen la pena. Permite a los niños desarrollar habilidades importantes que irán más allá de la capacidad del tiempo frente a la pantalla. Así que saca la plastilina, la tiza o la ropa de disfraces, ¡y fomentemos juntos estos momentos!