¿Le suena familiar? Prepara a tu recién nacido para la universidad Prepara el currículum de tu hijo para que luzca espectacular. Involúcralos pronto en actividades extraescolares. Llévalos a clases para que aprendan a hacer deporte y a bailar, para que sean los mejores cuando cuente. Todas estas oportunidades les permitirán destacar y acceder a las mejores universidades. Si su hijo no participa en al menos tres actividades extraescolares o no sabe leer antes de entrar en la guardería, es posible que ya esté suspendiendo. Y mientras haces todo eso, asegúrate de que dedicas suficiente tiempo a tu trabajo y planificas el futuro. ¿Lo das todo por tu equipo? ¿Se mantiene al día de sus responsabilidades domésticas mientras lleva a los niños de un lado para otro y asiste a reuniones de trabajo? Si no es así, puede que no esté haciendo lo suficiente.
Bueno, ¡eso es extremo! Pero esta parece ser la mentalidad de la cultura de los padres. Los padres se sienten presionados para competir constantemente. Sé el mejor. Dé a su hijo las mejores oportunidades ahora. Esto se convierte fácilmente en comer en el coche, no tener tiempo para ver a tus hijos y correr hacia una línea de meta desconocida.
Recientemente ha surgido la idea de«La velocidad de lo lento«. Carl Honoréautor de «The Power of Slow: Encontrar el equilibrio y la plenitud más allá del culto a la velocidad» afirma que «»Lento» en este contexto no significa hacerlo todo a paso de tortuga. Significa hacerlo todo al ritmo adecuado. Eso implica calidad por encima de cantidad; conexiones humanas reales y significativas; estar presente en el momento».
Los niños necesitan tiempo para jugar. Necesitan ese tiempo para conectar con usted como padre, en lugar de estar continuamente de un lado para otro de un evento a otro. No necesitan cosas, te necesitan a ti. Por ejemplo, algunos de mis mejores recuerdos de la infancia son de cuando mis hermanos y yo nos acurrucábamos en el sofá con mi padre y él nos leía una novela. Nos leía un capítulo por la noche y se detenía en las partes más atractivas. Disfrutaba mucho más de esos momentos sencillos que de mis locos años de instituto posteriores, en los que intentaba mantener la presión de estar metida en todo. ¿Y para ti? ¿Sus recuerdos favoritos de la infancia tienen que ver con correr de una actividad a otra o con el tiempo que pasaban en familia?
También ha habido movimientos y artículos recientes que muestran los beneficios de vivir menos ocupados. Los niños que están menos ocupados tienden a:
-Ser más creativo
-Valora las cosas sencillas
-Dormir mejor
-Se aburren y tienen tiempo para averiguar lo que realmente les interesa
-Menos propensos a quemarse
-Menos estresado
Al principio puede ser difícil adaptarse a la velocidad de la lentitud. Hay que estar dispuesto a decir que no muchas veces. Esto puede ser especialmente difícil cuando el resto de tus amigos te dicen que aceleres y hagas más. Sin embargo, pronto descubrirá que no sólo sus hijos disfrutan del nuevo ritmo, sino que usted también lo hace.